Puede la presión ocular llegar a ser demasiado baja

¿La presión ocular puede llegar a ser demasiado baja?

La presión ocular promedio para la mayoría de las personas se encuentra entre 10 y 21 mm HG (milímetros de mercurio). Cuando la presión ocular se mantiene de manera constante en 5 mm HG o menos, generalmente se considera que se trata de una presión ocular baja. Existe una gran variabilidad en la presión que un ojo puede tolerar. Así como algunos ojos son más sensibles a la presión alta, otros se ven afectados con mayor facilidad por presiones bajas. Por lo tanto, en lugar de la cifra de presión, es más importante saber si la presión baja está causando problemas con la estructura del ojo o la visión.

¿Cómo afecta la presión ocular baja al ojo?

Cuando la presión ocular es inferior a la que el ojo puede tolerar, el efecto es como el de una pelota que no tiene suficiente aire y partes de la pelota pueden doblarse o colapsar. La presión ocular baja a menudo se asocia con el desprendimiento de la coroides (la capa del ojo que se encuentra entre la retina y la esclerótica) y el aplanamiento de la cámara anterior (la parte interior delantera del ojo). La presión ocular baja también puede causar anomalías en la retina, el cristalino y la córnea. Todos estos cambios en el ojo pueden provocar una disminución de la visión.

¿Qué causa que la presión ocular baje?

La presión ocular puede llegar a ser demasiado baja por diversas causas, entre ellas, lesiones oculares, inflamación crónica, desprendimiento de retina y cirugía ocular . Cuando se realiza una cirugía de glaucoma para reducir la presión ocular, a veces puede reducirse demasiado. El riesgo de tener presión ocular baja después de una cirugía de glaucoma varía según el tipo de cirugía y diversos factores del paciente.

¿Cómo se trata la presión ocular baja?

El tratamiento depende de la causa subyacente. La presión ocular baja después de una cirugía de glaucoma suele ser un problema temporal que se resuelve a medida que el ojo se cura. Si la presión ocular baja persiste y provoca pérdida de visión, se puede considerar un tratamiento quirúrgico.